Aún no se conoce quién se encargará de acuñar la moneda belga, se barajan dos opciones: o bien que Hacienda lo haga, tal y como sucede en Holanda; o bien que sea la compañía Groep Heylen. Empresa que nació en los años ochenta del siglo pasado, con sede en la zona este de Amberes y entre cuyas múltiples disciplinas se encuentra la de fabricación de moneda. Pero como decimos, de momento es una incógnita.
Se ha hecho poca publicidad de esta noticia y de cómo el Departamento del Tesoro ha puesto a disposición del amante de las monedas el stock restante a precios económicos. Entre los que se encuentra la moneda que encabeza este artículo.
Recordemos que la Casa de la Moneda belga fue fundada por el Estado en 1830, después de que Bélgica se convirtiera en un reino independiente separado de los Países Bajos. En 1879 se inaugura el nuevo edificio en Saint Gilles con maquinaria nueva para producir los francos de oro, plata y níquel. En 1969 el nombre de Casa de la Moneda se modifica por el de Real Casa de la Moneda implicando que es la única institución que puede acuñar las monedas del país. Un año más tarde abre su nueva sede en el Boulevard Pacheco (Bruselas), dónde continúa hoy en día. A partir del 2002 el franco fue sustituido por el euro.
Esperemos que esta sea el último cierre relacionado con las Casas de la Moneda.